viernes, 4 de diciembre de 2015

La vida es un reto V

Os voy ha hablar en este post, sobre la experiencia que viví ayer en Murcia, en la que fue mi primera presentación. Necesito ser sincero y expresar todo lo que sentí. Ayer fue un día intenso, tanto por el torbellino de emociones y por todo los esfuerzos que tuvimos que hacer. Lo cierto es que estaba ilusionado, aunque todo había surgido de manera rápida, me había esforzado en dar la noticia a todas las personas que conocía, e incluso contraté un anuncio en Facebook. Iluso de mí, que me llevé una caja entera de libros, y tuvimos que recorrer la calles de Murcia con una pesada maleta que se caía a pedazos. Lo cierto es que no vino casi nadie. Cuando tuve que empezar, me sentía bastante torpe y por un momento estuve a punto de sucumbir al pánico. Entonces al hablar sobre mis experiencias y ver como me escuchaban atentamente quienes habían venido, a pesar de mis nervios, me di cuenta de que no podía venirme abajo, sobre todo por el apoyo que me estaban dando  (y por todo lo que había pasado a lo largo de mi vida). Lo único que siento es no haber dado lo mejor de mi mismo, pero alegro de que esta experiencia haya sido junto a ellos. Así que esta entrada esta dedicada especialmente para: Jesús, Alicia, Ginés y José; por supuesto también a Tania (una chica que estaba pasando por la librería y se acercó para que le firmará un ejemplar). Da gusto conectar tan bien con personas que, aunque a penas conoces, percibes que tienen un talento imparable. Estoy seguro de que van a dar que hablar y nos volveremos a ver en muchas ocasiones.
Cuando estaba de vuelta en el tren, me sentía bastante decepcionado y triste, pero no quería aferrarme a esa sensación, y me dije a mi mismo que si iba a recordar este día sería por todo lo bueno que había vivido, y todo el apoyo recibí allí y el que estoy recibiendo de todas partes. No sabéis lo agradecido que estoy, como me dijeron ayer: muchos grandes han pasado por algo parecido, que esto solo acaba de empezar. Sin duda es una vivencia de la que he podido aprender mucho. 






Y aunque la vida no sea como esperamos, siempre sabe sacarnos una sonrisa. En concreto esta mañana me ha sorprendido a modo de una canción de Mónica Naranjo. “Perder, fracasar, rendirse jamás...”.



2 comentarios:

  1. Al principio es normal que ocurran esas cosas, no debes quedarte con sensación agridulce sino valorar todo lo bueno que te aportó, como dices, jejeje. Piensa que te ha servido para ensayar con público real, los agradables momentos del viaje y en la chica esa tan maja de la biblioteca :) Por supuesto, también en estar arropado por esas personas que, de repente, han formado parte de todo el proceso casi por sorpresa. También puedes pensar en las personas a las que les hubiera gustado ir, pero por diversas razones de momento no han podido coincidir contigo ^_^
    En este tipo de casos, darse a conocer es muy difícil al principio. Pero de todo se aprende y los pequeños pasos son muy importantes en esta vida. Nadie aprendió a caminar sin pasar por el gateo y estoy seguro de que poco a poco irán surgiendo nuevas oportunidades y, con el tiempo, llegarás a más gente ;)
    Para mí sigues siendo todo un ejemplo de admiración, al igual que la gente que te arropó allí :) Gente con vuestra forma de pensar es lo que necesitamos en este mundo.
    Un abrazo y nos leemos (porque ya va siendo hora de que empiece a comentar entradas y capítulos xD)

    ResponderEliminar
  2. Gracias infinitas!!! Sin duda me quedo con todo lo positivo, y todo el apoyo que estoy teniendo. Hace unos años todo esto jamás me lo hubiera imaginado, así que no deja de ser un gran avance. Me alegro de que el camino esté lleno de personas simpáticas, amables y con talento, igual que tú. Un fuerte abrazo!!!

    ResponderEliminar